CICLISMO EN PISTA

Albert Torres celebra con la medalla de oro al ganar la prueba del Omnium / EFE
El velódromo de Santiago de Chile pasará a la historia del ciclismo español por ser el escenario en el que Albert Torres, tras una carrera mayúscula, puso el gran colofón a su carrera profesional proclamándose campeón del mundo de ómnium los 35 años.
El ciclista menorquín ha logrado una victoria que perseguía desde hace mucho tiempo y que por fin se ha hecho realidad gracias a una actuación muy sólida en las cuatro pruebas del ómnium que le han permitido concluir la jornada con 133 puntos y superar por la mínima al japonés Kazushige Kuboki y al belga Lindsay de Vylder.
La competición arrancó con Torres cuarto en el scratch -una prueba de 15 kilómetros que se realiza en grupo-, una buena posición que le permitió desarrollar confianza de cara al resto de la competición.
En el tempo race -donde se trata de acumular puntos en esprints intermedios- fue tercero, al igual que en la prueba de eliminación -cada dos vueltas un ciclista queda eliminado-, donde gestionó la carrera de forma impecable manteniendo la cabeza del grupo y exhibiendo una lectura de carrera propia de un especialista consumado.Estos resultados le llevaron a iniciar la decisiva puntuación final en primera posición.
En la prueba de puntuación, la tensión y emoción fueron máximas hasta el último sprint. Torres dependía de que el danés Larsen no ganará el sprint final para hacerse con el arcoíris y así fue. Su fantástica gestión de la prueba final dio sus frutos y al cruzar la línea de meta se coronó como campeón del Mundo.
Atrás quedan las fracturas de clavículade este año y lacaída en los Juegos de Paríspara que este triunfo adquiera más valor que nunca.

Albert Torres Barcelo celebra al ganar la prueba del Omnium / EFE
La imágenes, compartidas por Teledeporte, hablan por sí solas. Albert Torres, que ha renovado con el Movistar para la temporada 2026, se quitaba el caso y, llevándose la mano a la boca y tras unos instantes de duda, no podía contener la emoción tras ser consciente de que había logrado el oro.
"¿Primero? ¿Primero?", preguntaba el español, que luegose echaría a llorar con una mezcla de rabia y emociónabrazándose con su familia y su hijo, antes de recibir las felicitaciones de todo su equipo.