| piélago | |
| pronunciación (AFI) | [ˈpjelaɣ̞o] [piˈelaɣ̞o] |
| silabación | pié-la-go[1] |
| acentuación | esdrújula |
| longitud silábica | trisílaba |
| rima | e.la.go |
Del latínpelagus, y estedel griego antiguoπέλαγος (pélagos)[2], de origen incierto. Compáresearchipiélago,pelágico, el catalánpèlag, el italianopelago o el portuguéspélago.
piélago ¦ plural:piélagos
Y si de allí del Paraíso no sale, paresçe aún muy mayor maravilla, porque no creo que sepan en el mundo de río tan grande y tan fondo, al cual no puede llegare en algunos lugares sondé elpiélago con ochenta brazas de cordel, e colgado d' él doze libras de plomo.Cristóbal Colón et al.Textos y documentos completos. Página 380. Editorial: Anaya -Spain. 1982. ISBN:9788420623207.
Se echaba siempre alpiélago para amar a las sirenas.Luis Cardoza y Aragón.Guatemala, las líneas de su mano. Página 226. Editorial: Fondo de Cultura Economica USA. 1976.
No se contentaron con descubrir de qué manera, a pesar de las tormentas, y a riesgo de naufragios, podrían construirse bajeles que pusieran en comunicación las apartadas orillas; no se contentaron con que en la inmensidad delpiélago, donde no se veía ribera, hubiera para su rumbo señales en el cielo, y que en las caliginosas noches en que se encapotaba el firmamento, quedara a bordo la brújula que señala el polo.Nicomedes Pastor Díaz.Los problemas del socialismo (1848). Editorial: Anthropos. Barcelona, 1996.
Hemos navegado por regiones submarinas, muy próximos alpiélago; algas y líquenes palparon nuestras pieles desnudas; a veces un rayo refractado iluminaba de extrañas fosforescencias una zona movediza; en otras, temimos la embestida de los monstruos, el roce frío y mortal de los cetáceos.Marta Portal.Pago de traición. Página 27. 1983.
Como lo vemos también muchas vezes en las crecientes y avenidas de los ríos, que con la furia que llevan en unas partes, inchen lospiélagos hondos, y en otras se pierden los vados, y en su lugar quedan pozos ypiélagos.Antonio de Torquemada& Giovanni Allegra.Jardín de flores curiosas. Página 639. Editorial: Editorial Castalia. 1982.
quiera Dios que te defienda
d'estepiélago de males,
lazo de los vmanales,
çimiento de su contienda.Gómez Manrique.Cancionero de Gómez Manrique. Página 522. 1886.
Curiosamente, al abordar el conjunto del grabado, una extraña sucesión de ideas subsume a Augusto Jota en unpiélago de meditaciones y reservas en las que sus dos hijos desempeñan un papel que ni él mismo es capaz de discernir del todo.R. Humberto Moreno-Durán.El toque de Diana (1981). Editorial: Tercer Mundo. Bogotá, 1988.