
Pormapa de T en O, omapa Orbis Terrarum, se conoce a un tipo demapamundi, realizado en laEdad Media, caracterizado por su alta carga teológica. Las tierras emergidas y el océano que las rodea tienen forma circular, la «O», mientras que los mares que las dividen forman una «T» inscrita.
Los mapamundis que siguen este esquema OT se desinteresan de la exactitud cartográfica, limitándose a reproducir contenidos teológicos y simbólicos. Presentan de forma esquemática las grandes formaciones montañosas y corrientes fluviales así como algunos topónimos localizados por aproximación. Con el paso del tiempo se actualiza y enriquece la información, pero los mapas se llenan de contenidos fantásticos. Las ilustraciones se realizan a partir del santoral cristiano, siguiendo referencias bíblicas e incluso mitológicas, como lo es la presencia de lasamazonas en elmapa de Ebstorf.
La O representa el mundo de forma circular, la forma geométrica perfecta, rodeado por el océano. La T hace referencia a la articulación del espacio interior a la vez que alude a la cruz. El eje vertical sería el marMediterráneo que separaEuropa yÁfrica. El horizontal, perpendicular al anterior, se articula a partir delNilo, continuando en elmar Negro y el ríoDon, separando Europa yAsia. El mundo habitable -la «Oikumene»- abarcaAsia al oriente, en la mitad superior del mapa,Europa, en el cuadrante inferior izquierdo, yÁfrica, separada de Europa por el mar Mediterráneo. Cada continente aparece habitado por los descendientes de los hijos deNoé:Sem, Asia;Jafet, Europa yCam, África.Jerusalén ocupa el centro del mapa, siendo el ombligo del mundo.
El primero en realizar estos mapamundis fueIsidoro de Sevilla, que en susEtimologías indica cómo deben realizarse.
Los mapas de T en O irían ganando complejidad con el paso del tiempo. Un ejemplo son los mapamundis de los Beatos, siendo el más famoso elMapa Mundi de Beato de Liébana, originados en losComentarios al Apocalipsis de San Juan, del siglo VIII, que contienen numerosas ilustraciones acompañando al texto. El diseño pasa en ellos a ser oval o elíptico, representándose las tierras conocidas en torno al Mediterráneo. En algunas miniaturas a partir del siglo XIII el propio mundo, en su forma circular, aparece como el cuerpo deJesucristo que en ocasiones se encuentra sentado sobre él, como creador, principio y fin del mundo que gobierna desde el trono en que se convierte el propio orbe. En elmapamundi del Salterio de la abadía de Westminster Cristo aparece sobre el mundo, bendiciéndolo con la mano derecha y llevando en la izquierda otro pequeño orbe con la división en T. También en ocasiones se introduce elparaíso terrenal, localizado al oriente, en Asia, como puede verse en losmapamundis deEbstorf yHereford, ambos de hacia 1300, y lasantipodas, más allá del océano y habitadas por seres fantásticos.