Grabado representando la defenestración de Praga de 1618.
Ladefenestración es el acto de arrojar a una persona por unaventana.[1] La palabra procede del latínde ('de, desde'), yfenestra ('ventana').
Históricamente, el acto de defenestración tenía objetivos políticos y se dirigía hacia individuos con altos cargos. De manera figurada también significa la destitución o expulsión drástica de alguien de su cargo o puesto.[1] Partiendo de este último significado, la palabra se utiliza para implicar una crítica negativa hacia algo o alguien.
La reinaJezabel fue asesinada por este método por orden del reyJehú, en los Libros de los ReyesI yII.[2]
En 1962, el políticoJulián Grimau es defenestrado[5] al patio interior de la sede de laDirección General de Seguridad, en laPuerta del Sol deMadrid para encubrir lastorturas a las que había sido sometido por la policíafranquista. La policía, por boca del ministro de InformaciónManuel Fraga, declaró por el contrario que Grimau recibió un trato exquisito y que en un momento de su interrogatorio se encaramó a una silla, abrió la ventana y se arrojó por ella de forma "inexplicable" y por voluntad propia. Una versión que aceptó el juez de guardia a pesar de los indicios que existían de que no había sido un intento de suicidio.[6]. Unos años más tarde,Enrique Ruano, militanteantifranquista fue asesinado mientras se encontraba bajo custodia de laBrigada Político-Social, lapolicía política secreta delrégimen franquista. El 20 de enero de 1969 fue arrojado desde la ventana del piso séptimo del número 60 de la entonces calle General Mola (hoycalle del Príncipe de Vergara, 68) enMadrid.[7]