Konstantinos Gavras, más conocido comoCosta-Gavras (Lutra-Iraias,Atenas; 12 de febrero de 1933), es undirector decinefranco-griego.
Cadapelícula que dirige le sirve para hacer patente su compromisopolítico. En su primera época se dedicó althriller político y eldrama sentimental, mientras que en los últimos años se dedica más a laficción social.
Tras una estancia en Grecia, conoce el libro deVassilis Vassilikos,Z, en el que se reconstruye elasesinato organizado por lapolicía de un líderizquierdista, y el intento de disfrazarlo de accidente. En cuanto vuelve a Francia, escribe el guion en colaboración conJorge Semprún. Al no encontrar financiación, habla conJacques Perrin, al que conocía de la películaLos raíles de la muerte. Aprovechando esta ocasión, Jacques Perrin crea su propia productora para montar la película y utilizar sus contactos, en especial, los que tenía enArgelia. Allí rodarán.Jean-Louis Trintignant aceptó trabajar con una baja remuneración, y lo mismo hizoYves Montand. La película tuvo un enorme éxito en todo el mundo, con el público aplaudiendo al final de las representaciones; obtuvo el "premio del Jurado" en elFestival de Cannes, losÓscar a la mejor película extranjera y al mejor montaje.
Tras el montaje de "Z", una Nochebuena,Claude Lanzmann le habla deLise yArtur London que había sido viceministro de Asuntos exteriores deChecoslovaquia y era uno de los tres fugados de los procesos que se habían llevado a cabo enPraga en 1952 (Juicio de Slánský, también conocido por Slánský trial). Muchos intelectuales de su generación se habían visto fascinados por elcomunismo. También Yves Montand se une al proyecto deLa confesión (L'Aveu), y tras el éxito de "Z" consigue dinero para llevar a cabo su proyecto.
"La Confesión" se estrenó después de "Z", y en un momento bastante maniqueo: fue acusado primero de atacar a la derecha y luego a la izquierda, cuando lo único que hacía era denunciar lostotalitarismos. Algunos nunca le perdonaron haber levantado el telón que cubría elestalinismo y en ciertos círculos culturales fue considerado un apestado. La película tuvo un gran éxito y se convirtió en auténtico fenómeno político y cultural que marcó una época.
La películaClair de femme (1979) está basada en unanovela deRomain Gary, quién opinó que por primera vez estaba satisfecho con la adaptación a la pantalla de una de sus obras. Costa-Gavras se sintió fascinado por esta historia. ADustin Hoffman le pareció una de las historias de amor más hermosas que hubiera conocido y, durante el rodaje deMad City, le sugirió la idea de hacer unremake.
Algunos de sus proyectos no los realizó, como es, por ejemplo, la idea de llevar al cine la novela delargelinoBoualem SansalEl juramento de los bárbaros, para la cualJorge Semprún trabajó en su guion.[1] En 2019 anuncia su apoyo alPartido Comunista Francés para las elecciones europeas.[2]
El cine de denuncia social y política de Costa-Gavras