Movatterモバイル変換


[0]ホーム

URL:


Ir al contenido
WikipediaLa enciclopedia libre
Buscar

Carlos III de España

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Para el pretendiente durante la Guerra de Sucesión Española, véaseCarlos VI del Sacro Imperio Romano Germánico.
Carlos III de España
Rey de España

Carlos III retratado hacia 1765 porAnton Raphael Mengs (1728-1779).Museo del Prado.
Reinado
10 de agosto de 1759-14 de diciembre de 1788
(29 años y 126 días)
PredecesorFernando VI
SucesorCarlos IV
Otros títulos

26 de febrero de 1731-11 de diciembre de 1736
(5 años y 289 días)
PredecesorAntonio I
SucesorCarlos II

Rey de Nápoles
como Carlos VII
10 de mayo de 1734-6 de octubre de 1759
(25 años y 149 días)[1]
PredecesorCarlos VI
SucesorFernando IV

Rey de Sicilia
como Carlos V
2 de septiembre de 1734-6 de octubre de 1759
(25 años y 34 días)
PredecesorCarlos IV
SucesorFernando III
Información personal
Nombre completoCarlos Sebastián de Borbón y Farnesio
Nacimiento20 de enero de 1716
Madrid,España
Fallecimiento14 de diciembre de 1788 (72 años)
Madrid,España
SepulturaCripta Real del Monasterio de El Escorial
ReligiónCatólica
ResidenciaPalacio Real de Madrid
Familia
Casa realBorbón
PadreFelipe V de España
MadreIsabel Farnesio
ConsorteMaría Amalia de Sajonia(1738-1760)
HijosVéaseMatrimonio e hijos

FirmaFirma de Carlos III de España

Carlos III de España (Madrid, 20 de enero de 1716-Madrid, 14 de diciembre de 1788), llamado «el Político»[a]​ o «el Mejor Alcalde de Madrid», fuerey de España desde 1759 hasta su muerte en 1788;duque de Parma y Plasencia —comoCarlos I— entre 1731 y 1735; yrey de Nápoles —comoCarlos VII— yde Sicilia —comoCarlos V— entre 1734 y 1759.

Carlos era el tercer hijo varón deFelipe V que llegó a la vida adulta y el primero que tuvo con su segunda mujer,Isabel Farnesio, por lo que fueron sus medio hermanosLuis I yFernando VI quienes sucedieron a su padre en un primer momento. La muerte sin descendencia de estos llevaría a Carlos a ocupar el trono español.

Carlos sirvió a la política familiar como una pieza en la lucha por recuperar la influencia española en Italia: heredó inicialmente de su madre losducados de Parma yPlasencia en 1731; pero más tarde, al reconquistar Felipe V elReino de Nápoles y Sicilia en el curso de laGuerra de Sucesión polaca (1733-1738), pasó a ser rey de aquellos territorios con el nombre de Carlos VII. Contrajo matrimonio en 1738 conMaría Amalia de Sajonia, hija deFederico Augusto II, duque deSajonia y deLituania y rey dePolonia.

Infancia y juventud

[editar]
Carlos III con unos diez años de edad. Cuadro deJean Ranc.

Nació el 20 de enero de 1716 a las cuatro de la madrugada en elReal Alcázar de Madrid. Su cuidadora fue María Antonia de Salcedo. Luego, fueron responsables de él un grupo de hombres a cargo de Francisco María Spínola y Spínola, duque de San Pedro. El 25 de agosto de 1716, festividad de San Luis, rey de Francia, fue bautizado solemnemente en la iglesia del Monasterio de San Jerónimo el Real de Madrid junto con sus hermanos mayoresFelipe yFernando. Los padrinos de Carlos fueronMariana de Neoburgo, reina viuda de España y su tío abueloFrancisco Farnesio, duque de Parma; representados respectivamente por Ángela Foch de Aragón,condesa viuda de Altamira ycamarera mayor; y Domingo Acquaviva de Aragón, XVII duque de Atri.[2]

El 15 de enero de 1724 su medio hermano mayorLuis heredó el trono por la abdicación de su padre en su favor, pero falleció en agosto y su padre volvió a ser rey.

En 1729, se trasladó a Sevilla junto con su padre. Las naciones europeas, con elTratado de Utrecht de entre 1713 y 1715 y elTratado de Hannover de septiembre de 1725, firmado como respuesta alTratado de Viena de abril de 1725, establecieron sus posiciones en Europa. España había perdido muchos territorios e influencia tras la Guerra de Sucesión. Sin embargo, esta situación no duraría mucho ya que en los planes de Felipe V estaba recuperar sus territorios en Italia.

Desde Sevilla, el monarca puso en marcha un plan para asegurar la sucesión de su hijo en el Ducado de Parma, firmando elTratado de Sevilla con Inglaterra y Francia. Sin embargo, a la muerte del duque de Parma, el emperador del Sacro Imperio Romano Carlos VI invadió esos territorios y Felipe V, al no recibir apoyo de las dos potencias, amenazó con declarar la guerra por su cuenta.[3]​ En 1731, elSacro Imperio Romano se adhirió al Tratado de Sevilla y Carlos III, con 15 años, abandonó España rumbo a Italia para ocupar sus plazas.

Carlos III comoduque de Parma (1732), retratado porGiovanni Maria delle Piane, conservado enPalacio Real de la Granja de San Ildefonso.

El 1 de febrero de 1733 murióAugusto II, rey de Polonia, cuya monarquía no era hereditaria, sino elegida por el Parlamento polaco, elSejm. Felipe V envió desde Sevilla un emisario aVarsovia para negociar la candidatura del infante don Felipe y la del infante Carlos. Sin embargo, sus candidatos tenían pocas posibilidades frente a otros con apoyos de Austria y Francia. Felipe V se trasladó a Madrid y firmó el Tratado de El Escorial,Primer Pacto de Familia, con el que España abandonó su pretensión polaca y decidió aliarse con Francia para luchar contra el Sacro Imperio Romano a cambio de la ayuda de Francia en su campaña contra Nápoles y Sicilia, bajo el control austríaco, y para recuperarGibraltar. La guerra en Italia se ganó, y el 10 de mayo de 1734 el infante don Carlos ordenó proclamar rey a su padre. Sin embargo, Felipe V cedió Nápoles y Sicilia a su hijo.

Rey de Nápoles y Sicilia

[editar]
Véase también:Anexo:Reyes de Nápoles y de Sicilia
Carlos como Rey de Nápoles y Sicilia,Rey de las Dos Sicilias porGiuseppe Bonito, Madrid,Museo del Prado.

Durante su reinado en Nápoles y Sicilia (Carlos VII,Carlo VII enitaliano, o simplementeCarlo di Borbone, que es como se le suele llamar allí), intentó reformar y modernizar el reino, unificándolo, conquistando el afecto de los ciudadanos junto con su esposaMaría Amalia de Sajonia.

Retrato de Carlos III como rey de las Dos Sicilias (1737), retratado porGiovanni Maria delle Piane, conservado en elMuseo de Pontevedra (en depósito delMuseo del Prado).

Carlos contrajo matrimonio en 1738 conMaría Amalia de Sajonia, de 14 años. Ella era una princesa alemana de familia rica y fecunda, y su matrimonio tuvo un interés político, sin embargo fue también bien avenido. Se casaron por poderes en el Palacio de Dresde, en Sajonia, el 9 de mayo de 1738 y la boda se celebró en Nápoles el 9 de junio de ese año.[4]

Intentó dotar a la capital,Nápoles, del aspecto que debía tener una Corte. Hizo hincapié en mejorar las edificaciones públicas, como elHospicio, y trató de adaptar el palacio virreinal de acuerdo con la moda que imperaba desde la construcción deVersalles. También hizo construir complejos palaciegos en otros lugares del reino, como elPalacio Real de Caserta, uno de los mayores palacios reales del mundo, obra del arquitecto y urbanistaLuigi Vanvitelli. Otra de sus aportaciones fue elTeatro de San Carlos, para las representaciones de ópera.

Fachada norte delPalacio Real de Caserta ypasseggio monumental del parque, ambos diseñados porLuigi Vanvitelli.

Sus años como rey de lasDos Sicilias le dieron una experiencia muy valiosa como rey de España. Los barones y la Iglesia acaparaban más del 50 % de las tierras, y en el caso de los primeros tenían además jurisdicción sobre las mismas, por lo que impedían el acceso de sus vasallos a los tribunales. El rey limitó su influencia política, dejando clara la supremacía de la Corona, pero su poder económico siguió intacto. El 3 de julio de 1738, en ocasión de su matrimonio, fundó laInsigne y Real Orden de San Jenaro, de la cual fue su primer gran maestre.[5]

Escudo de Carlos de Borbón como rey de Nápoles y Sicilia.

En 1740, uno de sus consejeros, elduque de Salas, permitió a los judíos retornar al reino, de donde habían sido expulsados porCarlos I, con la finalidad de impulsar la actividad económica. El pueblo y la Iglesia se opusieron y Salas fue destituido, derogándose el permiso. Poco después, el arzobispoGiuseppe Spinelli intentó introducir laInquisición, pero el pueblo se opuso también a esta medida y hubo de desistir.

También durante estos años encontró el monarca a algunos de los hombres que más influirían en su vida, comoBernardo Tanucci, jurista al que nombró Ministro de Justicia primero y de Asuntos Exteriores después, y que quedó como miembro del Consejo de Regencia cuando Carlos III heredó el trono español.

Destaca el hecho de haber sido quien ordenó comenzar la excavación sistemática de las poblaciones sepultadas por la erupción delVesubio del año 79:Pompeya,Herculano,Oplontis y las VillasStabianas. No solo eso, sino que en 1752, al ordenar construir una carretera hacia el sur (precursora de la actual Statale 18), salieron a la luz los restos de la ciudad dePaestum, que llevaban años cubiertos por la maleza (parte del anfiteatro yace precisamente bajo dicha carretera). Fue un hallazgo especialmente importante, porque allí se hallaban tres templos griegos en muy buen estado de conservación. Se encargaron de su estudioFelice Gazzola (un culto aristócrata y militar de confianza de Carlos, al que servía desde su época de duque de Parma) yFrancesco Sabatini.

La muerte sin descendencia de su medio hermanoFernando VI, hizo recaer en Carlos la Corona deEspaña, que pasó a ocupar en 1759, dejando con gran tristeza, tanto de los reyes como del pueblo, la corona delReino de Nápoles y Sicilia a su tercer hijo,Fernando.

Rey de España

[editar]
Artículo principal: Reinado de Carlos III
Retrato ecuestre de Carlos III, porFrancesco Liani, alrededor de 1760.

Tras los fallecimientos deLuis I y deFernando VI sin descendencia, el trono de España pasó a Carlos III, tercer hijo varón deFelipe V y primero de su matrimonio conIsabel Farnesio, con gran experiencia de gobierno como rey deNápoles. Regresó a Madrid el 9 de diciembre de 1759 e introdujo, por primera vez en España, elDerecho divino comofuente y justificación de susoberanía regia.[6][7]Fray Sebastián de Jesús de niño le pronosticó que iba a ser rey. Carlos III a su fallecimiento promovió el proceso debeatificación mediante una carta dirigida en mayo de 1771 al cardenalarzobispo de Sevilla,Francisco de Solís.[8]

Política exterior

[editar]

La Guerra de los Siete Años (1756-1763)

[editar]
Artículos principales: Guerra anglo-española (1761-1763) y Guerra de los Siete Años.

El primer asunto que el rey trató fue laGuerra de los Siete Años. El monarca español se vio obligado a tomar parte en la guerra tras laocupación británica de Honduras y la pérdida de la colonia francesa deQuebec, lo que requirió la intervención española en el conflicto para frenar elexpansionismo británico por América.

En 1761 se firmó elTercer Pacto de Familia y España entró en el conflicto bélico. El monarca se equivocó en cuanto a la ayuda real que podía prestar Francia y el estado de sus tropas. Una escuadra inglesa de 53 buques con un ejército de 14 000 hombres consiguiótomar La Habana por la falta de entrenamiento de las milicias, en número muy inferior a los ingleses, y la incompetencia del gobernador de la plaza,Juan de Prado. Poco después una escuadra procedente de la India bombardeó y tomóManila. Los ingleses no pudieron extender su dominio por lasFilipinas gracias a la resistencia de las guerrillas organizadas porSimón de Anda.[9]​ La guerra terminó con laPaz de París de 1763. España cedió aGran Bretaña laFlorida y territorios delgolfo de México, a cambio de la devolución deLa Habana yManila. LaLuisiana francesa pasó a manos de España, más preparada para defenderla.Portugal, aliado de los británicos, recuperó lacolonia del Sacramento.

Guerra de Independencia de los Estados Unidos (1776-1783)

[editar]
Grandes armas de Carlos III conmanto real,cimera real de Castilla y el lemaA solis ortu usque ad occasum (Desde la salida del sol hasta el ocaso), origen de la frase atribuida aFelipe II:En mis dominios no se pone el sol, haciendo referencia a que el sol nunca se ponía en losterritorios españoles, pues abarcaban los doshemisferios. También se incluye la palabraSantiago, en referencia alSanto Patrón de España,Santiago el Mayor, y más concretamente al lema tradicionalSantiago y cierra España. Fueron utilizadas por sus sucesores hasta 1931, aunque en el sigloxix cayó en desuso.
Artículo principal: España en la guerra de Independencia de los Estados Unidos
Fronteras norteamericanas propuestas por la diplomacia española hacia el final de la Guerra de Independencia de los EE. UU., 3 de agosto de 1782
Retrato del monarca porGoya.

España continuó la alianza francesa. La sublevación de lasTrece Colonias contraJorge III dio a ambas potencias la ocasión para el desquite. Así, en laGuerra de Independencia de los Estados Unidos, España intervino junto a Francia y contra Gran Bretaña.

Desde laDeclaración de Independencia de los Estados Unidos (4 de julio de 1776) los sublevados recibieron ayuda española de forma solapada. En 1779 se rompieron las relaciones.Se asedió Gibraltar sin éxito, pero se pudorecuperar Menorca.Bernardo de Gálvez, gobernador de laLuisiana, ocupóFlorida. Inglaterra, aislada y sin poder someter a los rebeldes, tuvo que firmar la paz.

El Tratado de París puso fin a la guerra. España recuperó Menorca, Florida y la costa deHonduras, aunque no pudo conseguir lo mismo conGibraltar, que los ingleses se negaron en redondo a ceder.[9]​ España, de esta forma, contribuyó a la independencia de los Estados Unidos, hecho que creó un precedente para la emancipación de las colonias españolas en el sigloxix.

En 1785, el conde de Aranda, para poblar la Luisiana y evitar la instalación de los anglosajones, sugirió que el rey Luis XVI pudiera asentar allí a los últimosacadianos que no se habían asimilado en Francia. Las negociaciones con Vergennes finalizaron en abril de 1784. España se comprometia a pagar el coste del transporte y Francia se comprometía a pagar las pensiones debidas a los acadianos. En 1785 siete barcos fueron armados y partieron deNantes haciaNueva Orleans. 1.596 acadianos fueron transportados en los barcos elBon Papa y elSaint-Rémy, armados por Jean Peltier Dudoyer; laBergère, armada por Joseph Monesron Dupin; laCaroline, capitaneada porNicolas Baudin; elBeaumont,l'Amitié y laCiudad de Arcangel.

Rusia y Prusia

Dos nuevas potencias, Rusia y Prusia, entraron en el mapa político europeo del sigloxviii bajo los reinados de dos déspotas ilustrados:Catalina II yFederico II respectivamente. Ambos monarcas suscitaron interés y admiración en España, aunque la expansión rusa había alcanzado el Pacífico y se llegó a temer una alianza anglorrusa en el Mediterráneo. Tal evento no solo no llegó a materializarse, sino que Rusia se opuso a la pretensión inglesa de controlar todos los movimientos marítimos en tiempo de guerra.

Mediterráneo

[editar]

Carlos III había firmado un tratado de comercio con elImperio otomano siendo rey deNápoles ySicilia, pues consideraba a este imperio un freno a los intereses ingleses, austríacos y rusos. El Monarca excluyó una alianza que estimó no sería bien recibida en el país, pero intervino enOrán que dependía delImperio otomano, con el doble objetivo de conseguir liberar el mar depiratas berberiscos y obtener concesiones económicas. En 1775 envió unaexpedición militar contraArgel al mando del generalAlejandro O'Reilly que acabó en desastre. Después de dos nuevos ataques, en 1783 y 1784, se firmó el Tratado Hispano-Argelino de 1786.

Pacífico

[editar]

En diversas áreas delocéano Pacífico elVirreinato del Perú y elVirreinato de la Nueva España tuvieron la autorización del rey Carlos III de expandir el poder español y afianzarlo en el Gran Océano. Así pues, hubo varios intentos de incorporar la costa deOregón yAlaska al Virreinato de la Nueva España con grandesexpediciones a Canadá y Alaska como la deBruno de Heceta,Bodega y Quadra,López de Haro y otras. Mientras tanto, en el océanoPacífico Sur (llamado en ese momento el Mar del Sur) el Virreinato del Perú deManuel de Amat y Junyent ordenó dos expediciones: la primera, en la que se descubrió laisla de Pascua porFelipe González de Haedo tomando posesión de ella en nombre de Carlos III en 1770, y la segunda en 1772, capitaneada porDomingo de Bonechea que llegó alarchipiélago Tuamotu y a lasislas de la Sociedad donde estableció la soberanía española y la del rey sobre las islas. Los jefes de las principales aldeas deTahití aceptaron la soberanía de España y ser súbditos de la Corona española. Sin embargo, el proceso de ocupación de laPolinesia fue abandonado por el poco apoyo que le daban a esa iniciativa en Madrid y por los problemas religiosos del reino, por lo que dejaron la presencia española en esa área y abandonaron a finales de 1775.

Política interior: despotismo ilustrado

[editar]
Pabellón naval de España antes y después del cambio decretado por Carlos III en 1785.
Carlos III con el hábito de laOrden de Carlos III, hacia 1783-1784. Óleo deMariano Salvador Maella (Palacio Real).

En política interior, intentó modernizar la sociedad utilizando el poder absoluto del Monarca bajo un programailustrado.

En la línea de laIlustración propia de su época, Carlos III realizó importantes cambios —sin quebrar el orden social, político y económico básico,despotismo ilustrado— con ayuda de un equipo de ministros y colaboradores ilustrados, como elMarqués de Esquilache,Aranda,Campomanes,Floridablanca,Wall yGrimaldi.

Las reformas de Esquilache

[editar]

El Monarca nombró al marqués de Esquilache Secretario de Hacienda. Este incorporó señoríos a la Corona,[10]​ controló a los sectores eclesiásticos y reorganizó lasFuerzas Armadas. Su programa de reformas y la intervención española en laGuerra de los Siete Años necesitaron más ingresos, que se consiguieron con un aumento de la presión fiscal y nuevas fórmulas, como la creación de laLotería Nacional. Al mismo tiempo liberalizó el comercio de los cereales, lo que originó una subida de los precios de los productos de primera necesidad a causa de las especulaciones de los acaparadores y de las malas cosechas de los últimos años. Campomanes apoyó esta medida, pero el pueblo hizo responsable de todo al siciliano.

En marzo de 1766 se produjo elMotín de Esquilache. Su detonante fue la orden de cambiar la capa larga y el sombrero de ala ancha de los madrileños por la capa corta y el sombrero de tres picos. La tensión subió gracias a los pasquines que circulaban por la capital y que aparecían en sitios públicos, pasquines cuyo léxico y ortografía solo podían provenir de hombres con cultura. La manipulación realizada por sectores nobiliarios y eclesiásticos lo convirtió en un ataque directo a la política reformista llevada a cabo por ministros extranjeros del gobierno del rey.

Retrato de Carlos III, porJosé del Castillo (entre 1775 y 1785).

En Madrid el punto álgido de la revuelta se produjo cuando la muchedumbre que se había congregado frente alPalacio Real se topó con laGuardia Valona, que en 1764 había cargado contra el gentío durante la boda de una de las hijas del rey, la infantaMaría Luisa, con el futuro emperador de Austria. Se produjo una refriega y hubo bajas por ambas partes, sin que laGuardia Española interviniera. Carlos III recabó el parecer de sus consejeros, y aunque recibió opiniones contrapuestas, acabó siguiendo el consejo delconde de Revilla Gigedo, que declaró que dimitiría de su cargo antes que ordenar disparar a la multitud.

De Madrid, el levantamiento se trasladó a ciudades comoCuenca,Zaragoza,La Coruña,Oviedo,Santander,Bilbao,Barcelona,Cádiz yCartagena entre otras muchas. Pero mientras que en Madrid las quejas se referían al gobierno de la nación, en las provincias las quejas se dirigían contra las autoridades locales, lo cual revela un problema subyacente de corrupción e incompetencia administrativa.

Moneda de 4maravedíes con la efigie de Carlos III.

Los amotinados exigieron la reducción delprecio de los alimentos y la supresión de la Junta de Abastos, la derogación de la orden sobre la vestimenta, el cese de ministros extranjeros de Carlos III, su sustitución por españoles y un perdón general. El Monarca desterró a Esquilache y nombró en su lugar alconde de Aranda. Se tomaron medidas para acelerar la importación de cereales desdeSicilia y se reformaron los gobiernos concejiles, añadiendo a estos diputados del estado llano elegidos por sufragio.

La política religiosa

[editar]

Desaparecidos los ministros extranjeros, el rey se apoyó en los reformistas españoles, comoPedro Rodríguez de Campomanes, elconde de Aranda o elconde de Floridablanca. Campomanes, nombrado fiscal del Consejo de Castilla, trató de demostrar que los verdaderos inductores delmotín de Esquilache habían sido losjesuitas. Se nombró una comisión de investigación y sus principales acusaciones fueron:

  • Sus grandes riquezas.
  • El control de los nombramientos y de la política eclesiástica.
  • Su apoyo al papa.
  • Su lealtad almarqués de la Ensenada.
  • Su participación en laGuerra Guaranítica.
  • Su intervención en dicho motín.

Sectores de la nobleza y diversas órdenes religiosas estuvieron claramente en contra. Por todo ello, mediante el decreto real del 27 de febrero de 1767, seexpulsó a la Compañía de Jesús de España y sus dominios y todas las posesiones de la Compañía fueron confiscadas.

Reformas

[editar]

La expulsión de losjesuitas se quiso aprovechar para realizar una reforma de la enseñanza que debía fundamentarse en las disciplinas científicas y en la investigación, pero de hecho produjo en primer término una debacle en el sistema académico como consecuencia de la clausura de diversos centros excelentes (por ejemplo, la Universidad de Cervera), y el despiadado envío al exilio de centenares de profesores muy bien formados tanto en las tradicionales materias humanísticas como en las más novedosas físico-matemáticas. Así se echó del país a la primera plana de la que se ha venido en llamarEscuela Universalista Española del siglo XVIII, es decir profesores y científicos extraordinarios comoMateo Aymerich,Juan Andrés,Lorenzo Hervás oAntonio Eximeno.[11]

Las universidades fueron sometidas al patronazgo real y se creó en Madrid losReales Estudios de San Isidro (1770), como centro moderno de enseñanza media destinado a servir de modelo, y también laEscuela de Artes y Oficios de Madrid, que han perdurado hasta el sigloxx. Las propiedades de los jesuitas sirvieron, aunque con notables errores, para crear nuevos centros de enseñanza y residencias universitarias. Sus riquezas, para beneficiar a los sectores más necesitados, se destinaron a la creación de hospitales y hospicios.

Promovió un nuevo plan de Estudios Universitarios, que fue duramente contestado por laUniversidad de Salamanca, proponiendo un plan propio, que a la postre fue implantado años después.

El impulso hacia la reforma de la agricultura durante el reinado de Carlos III vino de mano de lasSociedades Económicas de Amigos del País creadas por su ministroJosé de Gálvez. Campomanes, influido por lafisiocracia centró su atención en los problemas de la agricultura. En suTratado de la Regalía de la Amortización, defendió la importancia de esta para conseguir el bienestar del Estado y de los ciudadanos y la necesidad de una distribución más equitativa de la tierra.

En 1776 en forma provisional y luego, de manera definitiva en 1777 creó en el sur deHispanoamérica elVirreinato del Río de la Plata como una escisión delVirreinato del Perú por su enorme superficie,[12]​ por la ambición dePortugal sobre toda la frontera hispano-portuguesa en América del Sur y las sucesivas expediciones deGran Bretaña y deFrancia sobre las costas de laPatagonia.[13][14]

En 1787, Campomanes elaboró un proyecto de repoblación de las zonas deshabitadas de las tierras de realengo deSierra Morena y del valle medio delGuadalquivir, creando lasNuevas Poblaciones de Andalucía y Sierra Morena. Para ello, y supervisado porPablo de Olavide, intendente real deAndalucía, se trajeron inmigrantes centroeuropeos. Se trataba principalmente de alemanes y flamencos católicos, para fomentar la agricultura y la industria en una zona despoblada y amenazada por el bandolerismo. El proyecto fue financiado por el Estado. Se fundaron así nuevos asentamientos, comoLa Carolina,La Carlota oLa Luisiana, en las actuales provincias deJaén,Córdoba ySevilla.

Victorino López Herranz:Carlos III fundando la colonia deLa Carolina (Jaén), una de lasNuevas Poblaciones establecidas en las regiones despobladas deSierra Morena.

Se reorganizó el ejército, al que dotó de unasOrdenanzas en 1768 destinadas a perdurar hasta el siglo XX, se impulsó el comercio colonial formando compañías, como la deFilipinas, y mediante elReglamento de libre comercio de 1778 que liberalizó el comercio con América. También destaca el Decreto de libre comercio de granos de 1765.

Otras medidas reformistas del reinado fueron la creación delBanco de San Carlos, en 1782, y la construcción de obras públicas, como elCanal Imperial de Aragón y un plan de caminos reales de carácter radial, con origen en Madrid y destino aValencia,Andalucía,Cataluña yGalicia.

Distribución de la población de España por provincias actuales según elcenso de Floridablanca (1787). Durante el reinado de Carlos III fue una preocupación constante la necesidad de incrementar la población de la nación.

Hizo un ambicioso plan industrial en el que destacan como punteras las industrias de bienes de lujo:Porcelana del Buen Retiro,Cristales de la Granja y traslada laPlatería Martínez a un edificio en el paseo del Prado, pero faltaron muchas otras para la producción de bienes de consumo, en toda la geografía española.

Entre los planteamientos teóricos para el desarrollo de la industria destacó el Discurso sobre el fomento de la industria popular de Campomanes, para mejorar con ella la economía de las zonas rurales y hacer posible su autoabastecimiento. Las Sociedades Económicas de Amigos del País se encargaron de la industria y su teoría en esta época.

Hizo hospitales públicos, servicios de alumbrado y recogida de basura, uso de adoquines, una buena red de alcantarillado. En Madrid, un ambicioso plan de ensanche, con grandes avenidas, monumentos como laFuente de Cibeles, la deNeptuno, laPuerta de Alcalá, lafuente de la Alcachofa, la construcción deljardín botánico (trasladando alpaseo del Prado el antiguo deMigas Calientes), el hospital de San Carlos (hoyMuseo Reina Sofía), el edificio delMuseo del Prado (destinado originalmente a Museo de Historia Natural).

La sociedad

[editar]

La nobleza

[editar]
Carlos III comiendo ante su corte, deLuis Paret y Alcázar (1775).Museo del Prado.

Descendió en número, debido a la desaparición de los hidalgos en los censos por las medidas restrictivas hacia este grupo por el rey. Representaba el 4 % del total de la población. Su poder económico se acrecentó gracias a los matrimonios entre familias de la alta nobleza, que propiciaron una progresiva acumulación de bienes patrimoniales. Mediante un decreto en 1783, el rey aprobó el trabajo manual y lo reconoció, favoreciendo a los nobles. A partir de ese momento, los nobles podían trabajar, cosa que antes no podían hacer, únicamente podían vivir de sus riquezas. Los títulos nobiliarios aumentaron con las concesiones hechas porFelipe V y Carlos III. Se crearon laOrden Militar de Carlos III, las Reales Maestranzas con estatutos nobiliarios y elReal Cuerpo de la Nobleza de Madrid. En contrapartida se pusieron numerosas restricciones a losmayorazgos y a los señoríos, aunque nunca llegaron a desaparecer durante el reinado.[cita requerida]

El clero

[editar]
Véase también:Regalismo en España

LaIglesia poseía cuantiosas riquezas. Siendo el clero un 2 % de la población, según el Catastro de Ensenada era propietaria de la séptima parte de las tierras de labor deCastilla y de la décima parte del ganado lanar. A los bienes inmuebles se añadían el cobro de los diezmos, a los que se descontaban las tercias reales, y otros ingresos como rentas hipotecarias o alquileres. La diócesis más rica era la deToledo, con una renta anual de 3.500.000 reales. Carlos III ayudó a repartir las riquezas entre los más necesitados en el país y abolió algunas leyes dictadas por la iglesia que suprimían derechos del pueblo.[cita requerida]

El estado llano

[editar]

Era el grupo más numeroso. En él se encontraban loscampesinos que gozaban de cierta estabilidad económica. Losjornaleros sufrían situaciones de miseria. De acuerdo con el Catastro de Ensenada, losartesanos representaban el 15 % del total de los asalariados y tenían mejores retribuciones que los campesinos. Laburguesía comenzó a despuntar tímidamente en España. Localizada en la periferia peninsular, se identificó con los propósitos reformistas y los ideales ilustrados del siglo. Fue especialmente importante enCádiz, por su vinculación al comercio americano, Barcelona y Madrid.[cita requerida]

El arte

[editar]

El rey Carlos III fomentó el arte y la artesanía con la creación de numerosasmanufacturas reales: como rey de Nápoles fundó elReal Laboratorio de Piedras Duras de Nápoles (1737), laReal Fábrica de Tapices de Nápoles (1737), laReal Fábrica de Porcelanas de Capodimonte (1743) y laReal Fábrica de Mayólicas de Caserta (1753). Posteriormente, como Carlos III de España, fundó elReal Laboratorio de Mosaicos y Piedras Duras del Buen Retiro (1759), laReal Fábrica de Porcelana del Buen Retiro (1759), laReal Fábrica de Platería Martínez (1778) y laReal Fábrica de Relojes (1788).[cita requerida]

Los gitanos

[editar]

Desde el fracaso de laGran Redada de 1749 losgitanos estaban sujetos a una situación muy problemática, que se pretendió resolver con una serie de iniciativas legislativas desde 1763, finalmente sustanciadas en laReal Pragmática de 19 de septiembre de 1783, con propósitos claramente asimiladores y de carácter utilitarista, tras dicha pragmática, se deja de considerar su origen o naturaleza diferenciada o inferior (raíz infecta); se prohíbe el uso de las denominacionesgitano ocastellano nuevo (tenidas por injuriosas); se concede libertad de residencia (excepto en la Corte y Reales Sitiospor ahora) y se permiten nuevos modos para ganarse la vida, incluyendo la admisión en gremios, pero se prohíben oficios como poseer tabernas o esquilar caballos, de vital importancia para el pueblo gitano; también se prohíben sus vestiduras tradicionales y sugerigonza (su idioma diferenciador, elcaló) y una vez más se establece la obligación de asentarse, abandonando el nomadismo; todo ello bajo graves penas a los desobedientes, que serían consideradosvagos y sujetos a las penas correspondientessin distinción de los demás vasallos (se les aplica el código penal general).[cita requerida]

Aquellos casos en los que un individuo se negase a acatar las leyes en cuanto a residencia, lengua, oficios, vestimenta y demás, la primera vez que fuese detenido sería marcado con un hierro candente en la espalda (en sustitución de las penas anteriormente previstas: la muerte o cortar las orejas), en caso de ser detenido una segunda vez serían condenados a lapena capital,[15][16]​ dicha ley no se aplicaba a los menores de diecieséis años, que serían separados de sus familias y educados por las Juntas o Diputaciones de caridad.[17]

Proyección posterior

[editar]
Detalle de la estatua ecuestre de Carlos III en laPuerta del Sol deMadrid.
Monumento a la fundación deLa Carlota (Córdoba), una de lasNuevas Poblaciones establecidas en las regiones despobladas deAndalucía por el programa de colonización de Carlos III.

Cuando el rey murió en 1788, terminó la historia del reformismo ilustrado en España, pues el estallido casi inmediato de laRevolución francesa al año siguiente provocó una reacción de terror que convirtió el reinado de su hijo y sucesor,Carlos IV, en un periodo mucho más conservador. Enseguida, la invasión francesa arrastraría al país a un ciclo de revolución y reacción que marcaría el siglo siguiente, sin dejar espacio para continuar un reformismo sereno como el que había desarrollado Carlos III.[18]

Reproducción de lasbanderas españolas elegidas por Carlos III en 1785 como pabellones de guerra y civil, y gallardete

Entre los aspectos más duraderos de su herencia quizá haya que destacar el avance hacia la configuración de España como nación, a la que dotó de algunos símbolos de identidad (como los que en el futuro se convertirían en suhimno y subandera nacionales) e incluso de una capital digna de tal nombre, pues se esforzó por modernizar Madrid (con la construcción de paseos y trabajos de saneamiento e iluminación pública) y engrandecerla con monumentos (de su época datan laPuerta de Alcalá, el Museo del Prado —concebido como Gabinete de Historia Natural—, elhospital de San Carlos o la construcción del nuevoJardín Botánico, en sustitución del antiguo deMigas Calientes) y con edificios representativos destinados a albergar los servicios de la creciente administración pública. El impulso a los transportes y comunicaciones interiores (con la organización del Correo como servicio público y la construcción de una red radial de carreteras que cubrían todo el territorio español, convergiendo sobre la capital) ha sido, sin duda, otro factor político que ha actuado en el mismo sentido, acrecentando la cohesión de las diversas regiones españolas.[18]​ Estas son solo algunas de las razones por las cuales Carlos III fue conocido como el «mejor Alcalde de Madrid».

Placa conmemorando la monumentalización de laPuerta de Alcalá deMadrid durante el reinado de Carlos III.
Estatua de Carlos III en elReal Jardín Botánico de Madrid, que estableció en su localización actual en 1781.

Relación con la masonería

[editar]

La masonería llegó a España en 1726, para el año 1748, ya había 800 miembros en Cádiz, que era la puerta hacia la América Española. Durante el reinado de Carlos III, la masonería gozó de amplias libertades, donde los líderes políticos y figuras sociales más influyentes eran miembros distinguidos de las logias (de los que se rumorea a los hermanosRodríguez Campomanes,Esquilache,Wall,Azara,Miguel de la Nava,Pedro del Río,Jovellanos, Valle, Salazar,Olavide,Roda, elduque de Alba, elconde de Floridablanca y elConde de Aranda), logrando convencer al rey de limitar la autoridad de lainquisición española (incluso estar detrás de laexpulsión de los jesuitas), debido a que la presencia de la masonería fue muy influyente en lasCortes de Carlos III yCarlos IV para alentar eldespotismo ilustrado, siendo casi omnipresentes en las aristocracias nobiliaria, literaria y militar que le rodeaban. No es de sorprender que en el año 1751, cuando lainquisición peruana tuvo un caso de acusación hacia un Francés, este reveló que en la ciudad de Lima ya había al menos unos 40 iniciados en la masonería.[19][20][21][22][23][24]​ También se menciona que a través deFrancisco Saavedra y los hermanos Gálvez (Matías de Gálvez y Gallardo junto aJosé de Gálvez y Gallardo), la masonería presentó vínculos con la gobernación de los territorios coloniales en la América hispana.[19]

Sin embargo, pese a esta leyenda rosa de su relativa tolerancia, Carlos III seguía siendo un devoto católico que persiguió a la masonería, primero en elReino de Nápoles (donde en 1751 había publicado un edicto prohibiendo la masonería como perturbadora de la pública tranquilidad y de violar los derechos de la soberanía Real)[25]​ y después enEspaña, ganándose la fama de ser el monarca europeo más distinguido en reprimir a laFrancmasonería (acorde al registro de sus cartas) y ser obediente a las indicaciones antimasónicas de la bulaProvidas Romanorum Pontificum deBenedicto XIV, lo que imposibilitó el desarrollo de una masonería organizada en España hasta laEra napoleónica.[26][27]​ Autores comoJosé Antonio Ferrer Benimeli llegan a negar la influencia masónica durante laIlustración en España.

Sin embargo, autores comoMiguel Morayta (avalando la tesis de que Carlos III fue masón) que sus actitudes antimasónicas se debieron en realidad a su preocupación “por su dependencia extranjera” (a los intereses deReino Unido y en menor medida de sus rivales en losilustrados franceses), o que incluso sus políticas antimasónicas fueron aparentes, acorde al juramento de obediencia masónica y su voto de secretismo sobre sus actividades dentro de la masonería (siendo entonces, persecuciones aparentes y acordadas). Pero también aceptó que, frente a la posibilidad de que no haya sido masón, entonces su juicio se inclinó a la benevolencia sobre la orden debido a la influencia de funcionarios que si lo fueron, y que consciente o inconscientemente, "hizo muchas obras masónicas" (afirmando además que ya habría hasta 210 logias masónicas tras 6 años de reinado).[28]​ Pese a ello, hay consenso en que se desarrolló indudablemente la masonería en la España ilustrada de Carlos III, del mismo modo a como se estaba desarrollando en los demás países europeos (concretamente en las casas reales y nobiliarias de Alemania, Francia e Inglaterra).[29]

Según el masónCarlos José Gutiérrez de los Ríos, deja la opinión de que el aumento de ingreso de personas a la masonería, durante el reinado de Carlos III, fue producto de la ingenuidad de muchos españoles:[30]

“los demás iniciados lo ignoran y entran de buena fe por el atractivo de la diversión y aún los lisonjean a los reclutas con el socorro mutuo gozan de todas las ocasiones de gran facilidad para introducirse y hallar amigos por todas partes…”

Matrimonio e hijos

[editar]
Retratos de Carlos III,Carlos IV y la reinaMaría Luisa de Parma, grabado a buril deManuel Salvador Carmona.
María Amalia de Sajonia, reina consorte de Nápoles y Sicilia; reina consorte de España. Retrato deMengs, 1761.

Contrajo matrimonio en 1737 conMaría Amalia de Sajonia (1724-1760), hija deFederico Augusto II. Tuvieron trece hijos, pero solo siete llegaron a adultos:

Títulos y tratamientos

[editar]

Esta tabla aún no está actualizada. Puedes contribuir aportando información sobre títulos y tratamientos de esta persona.

Ancestros

[editar]
Ancestros de Carlos III de España
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
16.Luis XIII de Francia
 
 
 
 
 
 
 
8.Luis XIV de Francia
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
17.Ana de Austria
 
 
 
 
 
 
 
4.Luis de Francia, Gran Delfín
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
18.Felipe IV de España
 
 
 
 
 
 
 
9.María Teresa de Austria
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
19.Isabel de Borbón
 
 
 
 
 
 
 
2.Felipe V de España
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
20.Maximiliano I de Baviera
 
 
 
 
 
 
 
10.Fernando María de Baviera
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
21.María Ana de Austria
 
 
 
 
 
 
 
5.María Ana de Baviera
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
22.Víctor Amadeo I de Saboya
 
 
 
 
 
 
 
11.Enriqueta Adelaida de Saboya
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
23.Cristina de Francia
 
 
 
 
 
 
 
1.Carlos III de España
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
24.Eduardo I Farnesio
 
 
 
 
 
 
 
12.Renato II Farnesio
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
25.Margarita de Médici
 
 
 
 
 
 
 
6.Eduardo II Farnesio
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
26.Francisco I de Este
 
 
 
 
 
 
 
13.Isabel de Este
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
27.María Farnesio
 
 
 
 
 
 
 
3.Isabel Farnesio
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
28.Wolfgang Guillermo del Palatinado
 
 
 
 
 
 
 
14.Felipe Guillermo I, elector palatino
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
29.Magdalena de Baviera
 
 
 
 
 
 
 
7.Dorotea Sofía de Neoburgo
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
30.Jorge II de Hesse-Darmstadt
 
 
 
 
 
 
 
15.Isabel Amalia de Hesse-Darmstadt
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
31.Sofía Leonor de Sajonia
 
 
 
 
 
 


Predecesor:
Antonio Farnesio

Duque de Parma y Plasencia

1731-1735
Sucesor:
Carlos II
Predecesor:
Carlos VI de Nápoles y IV de Sicilia

Rey de Nápoles y Sicilia
(Rey de las Dos Sicilias)

1734-1759
Sucesor:
Fernando IV de Nápoles y III de Sicilia
Predecesor:
Fernando VI

Rey de España

1759-1788
Sucesor:
Carlos IV

Notas

[editar]
  1. Se atribuye la expresión aPróspero Bofarull,Los condes de Barcelona vindicados.Ferrer del Río (1856, p. 265)

Referencias

[editar]
  1. Colletta, 1858, p. 100.
  2. «Madrid, 1 de Septiembre de 1716.- Ceremonias solemnes del Bautismo del Príncipe con la asistencia del Rey de Francia como padrino. El Almirante de la Armada Don Manuel López Pintado parte para Nueva España con la flota a su cargo. Se solemniza la primera festividad del B. Juan Francisco de Regis con asistencia de toda la Grandeza.».Gaceta de Madrid (35) (Madrid). 1 de septiembre de 1716. 
  3. Miguel del Rey y Carlos Canales (2012).En Tierra Extraña: Expediciones Militares Españolas. Edaf.ISBN 9788441432062. 
  4. Zoomnews.es (15 de junio de 2013).«Bodas reales con humor. Los Borbones. Sus anécdotas (II)». Archivado desdeel original el 22 de febrero de 2014. 
  5. Stair Sainty, Guy (2011).«Historia de la Insigne y Real Orden de San Jenaro».Real Casa de Borbón de las Dos Sicilias(en inglés). Madrid. Consultado el 20 de agosto de 2013. 
  6. Dalmacio Negro Pavón.«José Antonio y el Estado». 
  7. de Mesonero Romanos, Ramón (1844).Manual histórico-topográfico, administrativo y artístico de Madrid (D. Antonio Yenes edición). p. 44. Consultado el 3 de abril de 2016. 
  8. Cordobapedia Fray Sebastián de Jesús
  9. abDomínguez Ortiz, 2005.
  10. Mirabent y Soler, José (1824).Memorias del padre J. Mirabent y Soler. 
  11. Aullón de Haro, P. (2022). "Fenomenografía de la Escuela Universalista", en Id.,Idea de la Ilustración: Estudios sobre la Escuela Universalista, Madrid, Verbum.
  12. Vásquez, Juan Esteban (25 de agosto de 2017).«Por Qué se Creó el Virreinato del Río de la Plata en Argentina».Lifeder. Consultado el 13 de abril de 2020. 
  13. Cuesta, E. M. (2009). Impuestos imperiales : la Caja Real de Buenos Aires (1700-1800), Temas de historia argentina y americana, 14.
  14. Ternavasio (2009). «1. Ser parte de un gran imperio».Historia de la Argentina 1806-1852. Siglo veintiuno.ISBN 9789876290937. 
  15. Fraser, Angus (2005).Los gitanos. Ariel.ISBN 84-344-6780-1. 
  16. Filigrana, Pastora (2020).EL PUEBLO GITANO CONTRA EL SISTEMA-MUNDO. Reflexiones desde una militancia feminista y anticapitalista. Akal.ISBN 978-607-8683-18-5. 
  17. Texto de la pragmática en laNovísima Recopilación. Ley XI, pg. 367 y ss.
  18. ab«Carlos III de España».Biografías y Vidas. Consultado el 4 de julio de 2004. 
  19. abPérez-Bustamante, Rogelio (2017).«Miguel Cayetano Soler en el espíritu del reformismo ilustrado y masónico».Memòries de la Reial Acadèmia Mallorquina d'Estudis Genealògics, Heràldics i Històrics (27): 145-169.ISSN 1885-8600. Consultado el 25 de junio de 2023. 
  20. Benimeli, José Antonio Ferrer (1973).Masonería e Inquisición en Latinoamérica durante el siglo XVIII. Universidad Católica/Andrés Bello, Instituto de Investigaciones Históricas. Consultado el 25 de junio de 2023. 
  21. Ferrer Benimeli, José Antonio (1976).Masonería, Iglesia e Ilustración: un conflicto ideológico-político-religioso. Fundación Universitaria Española.ISBN 978-84-7392-087-2. Consultado el 25 de junio de 2023. 
  22. Benimeli, José Antonio Ferrer (1968).La masonería después del Concilio. Editorial AHR. Consultado el 25 de junio de 2023. 
  23. Berteloot, Joseph (1947).La franc-maçonnerie et l'église catholique. Collection hommes et cité. Éd. du Monde Nouveau. Consultado el 25 de junio de 2023. 
  24. «Historia de las sociedades secretas, antiguas y modernas en España y especialmente de la Francmasonería - Wikisource».es.wikisource.org. Consultado el 25 de junio de 2023. 
  25. Benimeli, José Antonio Ferrer (1 de enero de 1974).La masonería española en el siglo XVIII. Siglo XXI de España Editores.ISBN 978-84-323-0140-7. Consultado el 25 de junio de 2023. 
  26. Barbadillo, Pedro Fernández (20 de febrero de 2017).«Carlos III, un rey que nos vino ya enseñado».Libertad Digital - Cultura. Consultado el 25 de junio de 2023. 
  27. «LA MASONERÍA EN ESPAÑA (1728-1979)».www2.uned.es. Consultado el 25 de junio de 2023. 
  28. Morayta, Miguel (1915).Masoneria española: páginas de su historia. Establecimiento Tipográfico. Consultado el 25 de junio de 2023. 
  29. Alvarado Planas, Javier (2016).Masones en la nobleza de España: Una hermandad de iluminados.ISBN 978-84-9060-575-2. Consultado el 25 de junio de 2023. 
  30. Núñez, Fernán; Ríos, Carlos Gutiérrez de los; De, Conde (1898).Vida de Carlos III. Tomo I. Consultado el 25 de junio de 2023. 

Bibliografía

[editar]

Enlaces externos

[editar]
Control de autoridades
Obtenido de «https://es.wikipedia.org/w/index.php?title=Carlos_III_de_España&oldid=170539021»
Categorías:
Categorías ocultas:

[8]ページ先頭

©2009-2025 Movatter.jp