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Deportes

Lunes, 2 de febrero de 1998
Ultima actualización: 17:30

Juninho, roto

Una fractura de peroné le aparta del Atlético y casiseguro del Mundial

R. J. ALVAREZ / C. G. IZQUIERDO

MADRID.- El brasileño Oswaldo Giroldo "Juninho",del Atlético de Madrid, ha sido operado de fractura del peronéy del ligamento de la cara interna del tobillo izquierdo por el doctor PedroGuillén, y estará de baja unos cinco meses aproximadamente,según confirmó el traumatólogo de la clínicaFremap, de Majadahonda (Madrid).

Era el final casi anunciado de la patada que le propinó MíchelSalgado en el minuto 66 del partido que enfrentó ayer al Atléticoy al Celta en Balaídos (1-1). Juninho se perderá lo que quedade temporada con su equipo y, más que posiblemente, el Mundial consu selección.

Con estas perspectivas, el jugador no se pudo contener. Arropado porsu padre, por Radomir Antic y por Carlos Peña, delegado del equipo,el brasileño rompió a llorar masticando su infortunio: "Noquiero comentar la jugada, porque si lo hago voy a decir cosas que no levan a gustar [a Míchel Salgado]", subrayó.

A las 12.34 horas de la pasada noche, la escena en la sala de urgenciasde la clínica Fremap era tremenda. No había sangre, no gritos,ni los sustos típicos de un lugar como ése. La conmociónla ponían Juninho y su padre, metidos en una habitación conun cartel que ponía: "Yesos".

El jugador estaba sentado en una camilla, con la pernera izquierda delpantalón subida hasta la rodilla, esperando el primer vendaje delos muchos que le quedan. Estaba cabizbajo y se tocaba la cara constantemente.Su padre le preguntó qué le había dicho el médico."Operación", contestó el chaval. "¿Operación?",se preguntó el padre. Juninho cabeceó de un lado al otro,a punto del llanto.

Mientras, los doctores Pedro Guillén y José MaríaVillalón hablaban con los periodistas. El primero someteráhoy a Juninho a una intervención quirúrgica. El segundo asistiráa la misma, que empezará a la una de la tarde y se prolongarápor espacio de una hora, si no surgen complicaciones.

Radomir Antic llegó a la clínica a la una menos cuartoy se metió en la sala donde un asistente sanitario ya estaba colocandouna férula sobre la pierna del brasileño. Poco despuésentraron Carlos Peña y Dusan Antic, hijo del entrenador rojiblanco.Juninho no pudo aguantar las lágrimas.

Un cuarto de hora más tarde, todos los protagonistas salieronde la clínica. Juninho había pedido pasar la noche en su casa,motivo por el cual no quedó ingresado.